La Comunidad de Castilla y León cuenta con una Federación Territorial de Triatlón desde 1997, pero lo cierto es que muchos años antes ya se habían dado los primeros pasos para que este deporte contara en la región con elementos básicos e imprescindibles para su proyección, crecimiento y organización. Es la prehistoria de la Federación, un periodo de tiempo anterior a su reconocimiento oficial por parte de la Junta de Castilla y León que se antoja imprescindible.
A finales de los años 80, varios de los pioneros del triatlón en España decidieron organizarse para conformar la Comisión Nacional de Triatlón, germen de la Federación Española de Triatlón. Nombres como el de Marisol Casado, Enrique Quesada o Joaquín Ballesteros, entre otros, tendrían un papel determinante. Algunos de ellos, con vínculos en Castilla y León, no tardaron en congeniar con un grupo de triatletas de Salamanca, lo que propiciaría el surgimiento de la Delegación de Triatlón de Castilla y León con Raúl Prieto como primer responsable y 46 licencias en la Comunidad.
Desde Salamanca se impulsaron proyectos ambiciosos de formación de técnicos y se creó una escuela, se albergaron eventos importantes como el Campeonato de España de Duatlón de 1991, sin embargo, la Delegación apenas tenía funciones propias de una Federación y apenas había vinculación entre los diferentes triatletas de las diferentes provincias de la región.
En 1991 ya había en Castilla y León clubes con presencia en las provincias de Salamanca, Ávila, Valladolid y Segovia. Precisamente esta última provincia tomaría también el relevo de la Delegación al igual que Valladolid, en 1993, desde donde Rafael Ruiz creó el nuevo logotipo de la Federación, que es en términos generales el que ha llegado a 2022. También en este año se impulsaron los primeros campeonatos regionales y comenzaron a estrecharse los vínculos interprovinciales. Un año después, en 1994, también surgían los primeros circuitos.
La mejoría de los vínculos provinciales y las relaciones entre diferentes clubes permiten dar pasos que acercan a la Delegación al funcionamiento propio federativo, incluida la formación de oficiales. De hecho, en 1995 surge el primer proyecto para crear la Federación de Triatlón de Castilla y León, que tomaría el impulso determinante en marzo de 1996 en Medina de Rioseco, cuando se constituye la Junta Promotora, cuyos pasos se precisarán en la próxima publicación.