Hace cuatro años, un 22 de agosto, un vehículo acababa con la vida de la joven triatleta soriana María García Rubio mientras entrenaba con una compañera por una larga recta de la Nacional 111 a pocos kilómetros de Garray (Soria). Aquel suceso conmocionó a la sociedad soriana y muy especialmente a nuestro deporte. Ayer, su padre José Luis García, con el apoyo de su familia y amigos, volvió a realizar un emotivo triatlón en su recuerdo. Una vez más “Va por ti María”.
Alrededor de las 16.30 horas, en las inmediaciones del paraje del Peñón, a orillas del río Duero a su paso por la capital, José Luis inició el sector de natación. Primero nadó en sentido ascendente del río y después volviendo al punto de partida. En total, unos 200 metros de longitud refrescantes en las que las condiciones climatológicas y del río acompañaron de forma notable.
Tras realizar la transición, comenzó el sector ciclista, en este caso en bicicleta de montaña. José Luis, sobre la última bicicleta de este tipo que utilizó María, inició uno de los tramos más emotivos que le iban a llevar al lugar del accidente donde junto a su mujer, depositó varias rosas.
Era el momento de retornar a la capital, primero hasta Garray y luego por la senda de la ribera del Duero hasta la ciudad tras cerca de 20 kilómetros. Ya de vuelta en el peñón, tocaba dejar la bicicleta y culminar el triatlón con el parcial de carrera a pie. Apenas tres kilómetros después, José Luis volvía a culminar su triatlón más especial y duro, no hacía falta decirlo, pues en la mente de todos estaba el “Va por ti María”.
